EL ENTENDIMIENTO DEL OTRO Y LAS POSIBILIDADES DEL OTRO YO
¿A partir de qué momento establecemos vínculos con otras personas y qué propicia estos vínculos? El ánimo de colectividad desde lo puramente humano como la necesidad de socialización, aceptación y supervivencia ha creado las condiciones para que, las personas,, por diferentes razones, se cohesionen.
El tejido social, como un concepto definitorio, puede resumir esto de una manera objetiva y sistematizada, pero no nos brinda la posibilidad de entender al otro más que, a partir de los intereses que se tengan en común.
La colectividad es inherente al ser humano, ésta ha permitido su desarrollo a lo largo del tiempo. Las culturas originarias de lo que hoy conocemos como Latinoamérica poseían conceptos de colectividad que no solamente entendían al conjunto de personas, sino la integralidad de la naturaleza en un sistema completo, donde se entendía a los animales, ríos, lagos, montañas y demás como iguales.
Esto otorgaba una consideración hacia los demás que, en el pensamiento contemporáneo, heredado del pensamiento moderno establecido durante la mayor parte del siglo XX (donde predomina el individuo sobre el colectivo) se hace pensar que la idea de lo colectivo es más bien tribal, anticuado o poco progresista.
Alessandra Sequeira, mediante formas orgánicas que siguen patrones naturales a veces simétricos y a veces no, plantea la posibilidad del entendimiento del otro, tal como sucede con muchos organismos de la naturaleza. La idea de la restauración y replanteamiento del tejido social, brinda posibilidades de empatía en la sociedad contemporánea.
La empatía nos permite situarnos en el lugar del otro, entender su contexto y circunstancias; las motivaciones de sus acciones y las manifestaciones a las que el otro recurra para exteriorizarse. La otredad, nos da la oportunidad de ver y entender al otro como un sujeto independiente, diferente pero, como parte del colectivo y del tejido social.
Esto nos permite también asumir nuestra identidad y entender la identidad de otros,, que está construida a partir de nuestras relaciones sociales, idioma, manifestaciones culturales, hábitos de consumo y cosmovisiones. Dicho de otra manera, entender al otro, aceptarlo y más aún, abrazar la idea de la convivencia.
Toda esta conceptualización, Alessandra la resuelve por ejes temáticos de su obra, que en esta oportunidad se presenta en la sala principal de la Galería y Centro de Documentación El Attico. Los ejes sobre los que desarrolla la obra son: cosmovisión o manera de entender el mundo/universo, identidad,, colectividad, naturaleza y espíritu.
Los tres ambientes de la sala principal ofrecen un diálogo sensorial donde dos de ellos reciben las piezas en papel completamente expuesto, desnudo, sin enmarado, donde cada uno hace diálogo con el siguiente mediante una intervención en las paredes, de la misma manera en que se hacen las plegarias que protegen y sanan, abrazan y envuelven.
Asimismo,, en una de las salas, se presenta obra de carácter instalativo, que nos abre la posibilidad de la contemplación, la meditación y el silencio.
La posibilidad de entenderse como personas y las diferentes formas de entender cada pieza nos empujan al ejercicio de reconocimiento de lo que se ve y lo que se piensa. ¿Será una flor? ¿Será una estrella? ¿Raíces? ¿El iris de un ojo?
Y es, a partir de este ejercicio, que podremos ver en donde otros no ven y viceversa.
Fotografía: Selvin García